Analisis Retrospectivo del Kentucky Derby…”Foundation”, experiencia y condición las bases del triunfo.

Es común escuchar o leer en reseñas escritas por expertos analistas y handicappers, la importancia que tiene para un potro lo que estos llaman “foundation”, como una característica necesaria para que un caballo de carrera sea competitivo a un alto nivel. Específicamente en estos tiempos de Derby, la siguiente aseveración está siempre vigente...“un caballo debe tener una fundación fuerte para acumular la suficiente experiencia que le ayude a ganar el Kentucky Derby”. Esta aseveración, en teoría, implica que un potro aspirante a ganar el Kentucky Derby, tendría que haber competido en pruebas a la edad de dos años, para acumular la suficiente experiencia y “manejar” con éxito una gran variedad de posibilidades o variantes que se pueden presentar durante el “caos” de la carrera.

Experiencia en un caballo de carrera incluye cantidad de metros o “furlongs” acumulados. Pero también, un mayor número de participaciones aumenta la probabilidad de enfrentar antes de una carrera tan dura como el Kentucky Derby, situaciones variadas como podrían ser; correr rodeado de un número significativo de animales, recibir “terronazos” y tragar polvo corriendo detrás de los punteros, hacer el cambio de manos correctamente, manejar la partida y arrancar desde diferentes posiciones, correr bajo la lluvia en una pista fangosa, enfrentar el giro de los dos codos, haber manejado distancias que se acerquen a la milla y ¼ del Derby, aprender a relajarse y poder correr detrás de otros competidores y muchas variables más que no podríamos mencionar en su totalidad en este breve artículo.

Esta aseveración que muchos defienden, esta basada en datos históricos que no pueden ser refutados. Desde el martes 16 de Mayo de 1882 cuando el jockey Babe Hurd se impuso con Apollo (Lever), un potro que nunca corrió a los dos años, ningún otro participante sin experiencia como dosañero ha podido imponerse en el Kentucky Derby. Por lo tanto desde Apollo, como si su triunfo hubiera implicado un maleficio para cualquier participante bajo la misma condición, ya son 135 ganadores de la prueba que previamente tuvieron al menos una participación en alguna prueba como dosañero.

Cuando hacemos un análisis retrospectivo de los ganadores del Kentucky Derby desde 1991 hasta la edición del año pasado y lo comparamos decada a decada hasta llegar al grupo de 20 potros que están clasificados para participar en la edición del 2018, nos damos cuenta de que existe una nueva tendencia con respecto al número de actuaciones o el nivel de “foundation” o experiencia que un potro debería tener para correr la prueba con posibilidad de triunfar. En los años noventa, el número promedio de actuaciones que hacía previamente el potro que terminaba imponiéndose en el Kentucky Derby, era de casi nueve actuaciones. Este número se redujo drásticamente a 6 en la década del 2000 al 2010 y se ha mantenido en ese nivel en los últimos siete años. Cuando calculamos el número promedio de actuaciones previas al Kentucky Derby que han realizado los posibles aspirantes en la edición del 2018, nos encontramos con que la cifra se mantiene.

Varios factores pueden haber influido en este cambio y en esta nueva tendencia que implica llevar a la carrera un mayor número de animales que han sido ligeramente corridos, “frescos”, con pocas actuaciones. Uno de estos factores sin duda tiene que ver con el nuevo sistema clasificatorio a base de puntos que se implantó para la edición número 139 de la carrera la cual se corrió en el año 2013. Previo a este cambio, los caballos clasificaban al Kentucky Derby basado en la cantidad de dinero que estos producían cuando ganaban o figuraban en algunas pruebas de grado que estaban previamente establecidas. El nuevo sistema fue creado con la idea de hacer todo el proceso clasificatorio más claro, práctico y comprensible para todos aquellos interesado en seguir los resultados de la llamada “Ruta al Kentucky Derby”. Las carreras más ricas en cuanto a puntos a repartir, están incluidas en un selecto grupo conocido como  “La Championship Serie”. Estas se llevan a cabo entre principio de Marzos y mediados de Abril, por lo que no tiene sentido desgastar a los caballos con muchas actuaciones previas y algunos entrenadores solo preparan a sus mejores prospectos para estar listos y buscar la clasificación participando en una o dos de estas pruebas.

Todd Pletcher uno de los entrenadores más exitosos del hipismo en Norteamérica, en principio con cuatro animales clasificados para correr el próximo 5 de Mayo en Churchill Downs, no ha tenido el mismo éxito con sus pupilos corriendo el Kentucky Derby. Pletcher debió ensillar 28 de sus animales entre los años 2000 al 2010 para conseguir su primer triunfo con Super Saver. Luego de ese triunfo, Pletcher espero 7 años más y tuvo que ensillar 20 animales entre el 2010 y el 2017 antes de alcanzar su segunda victoria con Always Dreaming en la edición del año pasado. Con respecto a esto, Pletcher comentó en alguna oportunidad que en parte la causa de tal situación tenía que ver con el hecho de que por años, sus pupilos llegaron a la prueba habiendo corrido o participado en un alto número de pruebas. Pletcher al igual que otros entrenadores hoy, no descartan que la experiencia del animal es importante para que un potro pueda ganar el Kentucky Derby, pero más importante aún es, que el animal alcance el tope de su condición, su mejor momento, justo antes de la prueba y con muchas actuaciones o carreras corridas previas al Derby, ese tope de condición se podría alcanzar muy pronto y haber disminuido para cuando llega el momento de correr la carrera.

Pocos potros han sido capaces de ganar el Kentucky Derby corriendo tan solo cuatro o menos veces antes de la prueba. Big Brown que se impuso en la edición del 2008, llegó a la carrera invicto en tan solo tres salidas (caso similar al de Justify). Es interesante que el triunfo de Big Brown se producía 91 años después de que Exterminator en el año 1918 ganara la carrera con tan solo cuatro actuaciones. Previamente a Exterminator, Regret en 1915 que solo había corrido tres veces y Alan-a-Dale con cuatro actuaciones también lograron hacerlo. Animal Kingdom en el 2011 con tan solo 4 pruebas de experiencia, es el más reciente ganador del Derby en haber llegado con 4 o menos actuaciones previas a la carrera. En los últimos 27 años, desde 1991 hasta el 2017, 6 ganadores de la prueba que incluyen a Grindstone (1996), Fusaichi Pegasus (2000), Barbaro (2006), I’ll Have Another  (2012), American Pharoah (2015) y Always Dreaming (2017)  llegaron al Kentucky Derby con apenas 5 actuaciones de experiencia.

Por otro lado, el caso contrario, Charismatic (1999) con 14 actuaciones, entrenado por D Wayne Lukas, un entrenador que normalmente le da “garrote” a sus caballos (recordemos a Mr. Z con 12 actuaciones antes de terminar en el quinto puesto en el Derby) es el animal que en los últimos 27 años ha corrido más veces antes de imponerse en la prueba. Real Quiet (1998) con 12 salidas, entrenado por Baffert, así como Sea Hero (1993) y California Chrome (2014) ambos con diez salidas también lograron imponerse en la carrera.

Entre los animales clasificados para correr en la edición del 2018, Magnum Moon invicto en cuatro salidas, entrenado por Todd Pletcher y Justify invicto en tres salidas, entrenado por Bob Baffert, que nunca participaron en una prueba a los dos años, son junto a Hofburg, que tiene un triunfo en tan solo tres salidas, los animales menos corridos del grupo y que llegan a la prueba con 4 o menos actuaciones. Mientras que My Boy Jack con 10 actuaciones, y Firenze Fire junto a Flameaway ambos con 9, son los que más veces han corrido.  Nueve ejemplares, casi la mitad del grupo, tienen campañas de 5 y 6 actuaciones antes de correr en el Kentucky Derby.

Con respecto al número de actuaciones promedio a los dos años que realizaron los ganadores del Derby en los últimos 27 años, podemos observar que de casi 5.5 actuaciones en la década de los años 90, el promedio ha ido disminuyendo hasta algo más de tres actuaciones desde el año 2000 al 2017. Real Quiet (1998) con 9 carreras como dosañero y California Chrome (2014) con 7 tuvieron las campañas de dos años más extensas. Mientras que Monarchos (2001), Smarty Jones (2004), Bárbaro (2006), Animal Kingdom (2011) y Always Dreaming (2017) solo corrieron en dos oportunidades a los dos años y Fusaichi Pegasus (2000) y Big Brown (2008) solo lo hicieron en una oportunidad. Entre el grupo de animales que conforman la edición del 2018, My Boy Jack, casualmente el animal con más actuaciones, corrió 6 veces a los dos años, mientras que Noble Indy y Hofburg corrieron una sola vez y como ya mencionamos, Magnum Moon y Justify nunca corrieron a los dos años. El mayor número de animales entre los posibles participantes, 12 en total, corrieron 5 o 3 veces, con 6 animales en cada caso.

El Kentucky Derby no es cualquier carrera, no solo por lo que significa ganarla, sino por la calidad de los animales que participan, así como el alto número de competidores, la distancia y lo “agresivo” especialmente del primer ¼ de milla donde los potros están expuestos a mucho contacto. Serán los animales más “profesionales” los que tengan la mejor posibilidad de manejar todas estas situaciones. El caballo aprende y se acostumbra a la repetición, a la rutina, cuando sabe que esperar está mejor preparado para realizarlo correctamente. Por esto es importante haber experimentado la mayor cantidad de situaciones posibles antes de correr una carrera como el Kentucky Derby, donde básicamente puede pasar de todo. Por supuesto que en este aprendizaje juega papel fundamental el sistema psico-sensorial del animal que es el que le va a permitir captar, procesar y responder correctamente a esa gran cantidad de estímulo que no solo incluye el caos de la carrera, sino también los más de 100.000 fanáticos que estarán presentes y la bulla ensordecedora que estos producen. Además el potro con más posibilidad de ganar, será aquel que en su proceso de preparación, en su “foundation”, ha ido creciendo en su condición física y mental de manera gradual, para alcanzar el tope de su condición como atleta al momento de enfrentar la carrera. De manera que un equilibrio entre experiencia y nivel de condición física es la clave para lograr el mejor resultado en la prueba.

Magnum Moon y Justify, dos de los principales candidatos al triunfo, les sobra calidad para imponerse en la prueba. Sin embargo, su falta de experiencia necesita ser compensada por su nivel de madurez e inteligencia. Pero además ambos, deberán enfrentar la historia y tratar de vencer 135 años de tradición, más que de “maldición”, que dejó Apollo después de su triunfo en 1882.

Enrique Castillo

@dormellostud

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